Suave piel
y cabello blanco
me hacen a veces
pensar en la muerte.
Sin más,
un viento frio
surge el llanto
no puedo ser del tropel
que en ella se vierte.

De nuevo finales del mes de abril
nos sigue haciendo reír y sufrir

Vida de recuerdos en bumerán
que puntuales
vienen y se van.
Del lluvioso abril
refulge un arcoíris
sobre Sierra Nevada
quedo anegada,
llega la fecha
cual onda de eco
que en este recinto
solo es sirimiris.

Abril… Abril… Abril

Los pájaros en sus nidos
comida reclaman
las madres llegan raudas
y sus bocas tapan.

Abril… Abril… Abril
tan pronto llorar
como haces reír.

© Araceli García Martín